CABRA / MEDIO AMBIENTE

La unidad vertical de equipo en altura de la Consejería de Sostenibilidad introduce ejemplares de una especie vulnerable en el Picacho de Cabra

Equipo que realiza la repoblación en la zona del Picacho de Cabra
La idea es conseguir el aumento de la población de Achyrophorus rutea, una hierba perenne, endémica de la zona que se encuentra amenazada, sobre todo por el ramoneo de herbívoros

La Consejería Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul ha desarrollado una segunda actuación experimental para la reintroducción de la planta Achyrophorus rutea o Talavera, catalogada de vulnerable, con el objetivo de reforzar sus poblaciones en el Parque Natural de las Sierras Subbéticas, según ha informado el delegado territorial, Rafael Martínez.

La actuación se enmarca en los convenios suscritos entre la Consejería, el Ayuntamiento de Cabra y la Real Archicofradía de Nuestra Señora de la Sierra de Cabra, para mejorar las poblaciones y el hábitat de especies de flora amenazada con la puesta en marcha de programas de reintroducción.

Achyrophorus rutea es una hierba perenne, endémica de las Sierras Subbéticas cordobesas (Sierra de Rute, Sierra de la Gallinera y Sierra Horconera), de la que se registran menos de 800 ejemplares, distribuidos en tres poblaciones, y forma parte del catálogo de flora y fauna amenazada como especie vulnerable. Su principal amenaza es el ramoneo en determinadas zonas por parte de los herbívoros, principalmente el ocasionado por las cabras.

En el año 2022 se realizó una primera actuación experimental para la introducción benigna de semillas de Achyrophorus ruteaen los citados montes públicos, con un total de 375 semillas en una superficie de 200 m².

En lo que va de año 2024 se ha realizado una segunda actuación experimental de esta especie, que vive en fisuras y pequeñas oquedades de roquedos calcáreos verticales y en su base, colonizando los claros y canchales más umbríos. Florece y fructifica de abril a junio. Los frutos germinan a finales de otoño y las plantas florecen en primavera.

36 ejemplares plantados en fisuras y oquedades

De forma manual, los técnicos, con la ayuda de una espátula de laboratorio, han plantado 36 ejemplares de Achyrophorus rutea en fisuras y oquedades de dos paredones rocosos y umbríos, unos microhábitats previamente estudiados y seleccionados por ser determinantes para el éxito de las actuaciones.

Dada la especificidad y particularidades del hábitat, para la siembra se ha contado con la colaboración de tres miembros de la Unidad Vertical de Conservación Ambiental (UVCA) de los agentes de Medio Ambiente de la Consejería. Esta unidad está especializada en la realización de trabajos verticales en el medio natural para el seguimiento y conservación de flora y fauna silvestre.

La finalidad de esta segunda actuación es un intento de establecer un núcleo poblacional de Achyrophorus rutea, con un objetivo de conservación, en una nueva localidad no incluida en su área de distribución conocida, pero dentro de un hábitat y de un área biogeográfica apropiados.

Colección viva de semillas del jardín micológico La Trufa

El origen de las semillas es la colección viva establecida en el jardín micológico La Trufa, en espacios dedicados a la conservación, en los que se pueden encontrar colecciones vivas especialmente importantes para mantener planta con un mismo origen ante la desaparición de alguna de sus poblaciones naturales.

Los ejemplares de esta colección proceden de la localidad natural de la Sierra de Rute y están representados en el jardín con un número suficiente de individuos para albergar la mayor diversidad genética para su conservación y estudio.

La estrategia de conservación seguida permite aumentar las probabilidades de supervivencia de una especie a largo plazo es el establecimiento de nuevas poblaciones de una especie rara o amenazada en una localidad donde no existe constancia de que haya existido alguna vez con la finalidad de establecer una población viable dentro del área de distribución natural de la especie.