La Comisión de Patrimonio da luz verde a unas obras de mantenimiento en la parroquia de Santiago Apóstol de Iznájar
La Comisión Provincial de Patrimonio de la Delegación de Turismo, Cultura y Deporte, que preside el delegado territorial, Eduardo Lucena, ha informado favorablemente acerca de las obras de conservación y mantenimiento en la parroquia de Santiago Apóstol de Iznájar. El proyecto incluye la reparación de los morteros que forman parte del zócalo de la parroquia, afectados por la humedad del subsuelo con pérdida de material.
Las obras contemplan diferentes fases. Una primera de trabajos previos y acotación de zonas, y otra posterior consistente en el picado de paramentos enfoscados hasta el soporte, aplicación de consolidante en base de silicato potásico y de capa base y de acabado de mortero de cal.
La iglesia de Santiago Apóstol de Iznájar fue declarada Bien de Interés Cultural (BIC), con la tipología de Monumento y está inscrita en el Catálogo General del Patrimonio Histórico de Andalucía (CGPHA) por decreto, que declara asimismo monumento BIC al edificio del Pósito y delimita el entorno común de protección de la iglesia, el castillo, la muralla urbana y el pósito de Iznájar.
Parroquia de Santiago Apóstol
La parroquia de Santiago Apóstol se levanta dentro del recinto amurallado de la villa, junto a otros edificios monumentales como el castillo, el recinto amurallado y pósito. Estos inmuebles conviven con un conjunto de casas de arquitectura popular. Su perfil, junto al de la fortaleza, se impone como un elemento singular de referencia en el ámbito urbano y una gran extensión del territorio que lo rodea. La iglesia está compuesta por una nave, con cabecera semicircular y un crucero de brazos cortos cubierto por bóveda de cañón. El cuerpo principal es de fábrica renacentista y excelente factura, compuesta por cabecera, crucero y comienzo de la nave, que continúa hacia los pies con otra de menor entidad, posiblemente restos de la primitiva iglesia. El edificio cuenta con un retablo mayor de mediados del siglo XVIII.