LUCENA: El ayuntamiento mantiene las ayudas para que las familias lucentinas tengan garantizado el acceso a un mínimo vital de agua en caso de necesidad
En 2017 se beneficiaron de este programa 98 familias y 4 entidades sociales. El consistorio dispone de 30.000 euros para esta línea de ayudas, que podrán ampliarse.
Teresa Alonso, concejal delegada de Servicios Sociales, ha informado hoy sobre el inicio del plazo de solicitud de las ayudas para hacer frente al pago del suministro vital de agua para familias en riesgo de exclusión social, programa del que se beneficieron durante 2016 unas 98 familias, duplicando el número de ayudas concedidas el año anterior.
La convocatoria, que se mantendrá abierta durante todo el año, es similar a la que se desarrolló en 2017 y pretende garantizar un mínimo de agua vital a los lucentinos que lo necesiten.
Esta convocatoria va dirigida a personas físicas que estén empadronadas en la localidad, que residan en una vivienda propia o de alquiler; para lo que deberán entregar la documentación pertinente que así lo acredite. Se pretende cubrir tres metros cúbicos por usuario y la subvención puede oscilar entre el 100% y el 50% del recibo de agua.
Alonso indicó que hay una partida de 30.000 euros para este fin. No obstante, el pasado año, a pesar del incremento del número de ayudas concedidas, solo se utilizaron 13.300 euros, destinándose el resto de la partida a otras ayudas de emergencia social a las que está vinculada.
Estas bonificaciones se pueden solicitar en el Servicio de Información y Atención al Ciudadano (SIAC), y la documentación que se debe aportar es la solicitud de la ayuda, que se la ofrecerán en el mostrador, fotocopia de la factura, fotocopia del DNI de todos los miembros mayores de 14 años, el libro de familia, la vida laboral de todos los miembros de la unidad familiar mayores de 16 años, contrato de trabajo o certificado que acredite que no tienen ingresos, documentos acreditativos en el caso que exista en la unidad familiar una persona con discapacidad, etcétera. Una vez concedidas las ayudas tendrán validez de un año de vigencia y se incluye la obligación de que los beneficiarios notifiquen al ayuntamiento de algún cambio en su situación socioeconómica.
Aquellas personas que ya han disfrutado de estas ayudas solo tendrán que solicitar la revisión de su caso, para que se compruebe que las causas que motivaron su concesión en 2017 se mantienen.