VÍDEO: Valores de la Subbética | Miguel Ángel Borrego, manos que preservan el arte y la historia
Cada domingo, os ofrecemos una cita con los galardonados en la Gala Valores de la Subbética 2024, organizada por el GDR, donde tenemos la oportunidad de mostraros a personas cuyo ejemplo y compromiso enriquecen nuestra comarca.
En esta tercera semana nos acercamos a Miguel Ángel Borrego, artista y restaurador que ha convertido su pasión por el arte en una misión de vida: preservar el patrimonio cultural de la Subbética.
Desde sus primeros pasos como escultor en plastilina hasta su compromiso con la restauración de obras históricas, su trayectoria refleja una dedicación incansable al arte y a la identidad de su tierra. Ahora, sueña con inspirar a futuras generaciones desde las aulas, transmitiendo el amor por el arte que lo ha acompañado desde la infancia.
Miguel Ángel Borrego, un artista y restaurador ruteño de 35 años, encarna la dedicación al arte y al patrimonio cultural. Su vida es una historia de pasión, aprendizaje y compromiso con la conservación de la identidad artística de la comarca Subbética.
Las manos de un niño esculpiendo plastilina
Desde su infancia, Miguel Ángel mostró un talento innato para el arte. Sus primeras obras, realizadas en plastilina, representaban la Semana Santa de su pueblo y, en ocasiones, llegaron a ser expuestas al público. Con esas manos de escultor en ciernes y una pasión incipiente por las Bellas Artes, inició un camino que lo llevaría a convertirse en un defensor del patrimonio artístico y religioso de su tierra.
La restauración, un arte al servicio de la comunidad
Convencido de la riqueza cultural que albergan los pueblos de la comarca, Miguel Ángel ve la restauración como un medio para preservar una parte esencial de la identidad popular.
“Para mucha gente, la cultura y el arte están en sus iglesias, en sus ermitas o en esos pequeños edificios históricos que forman parte de su día a día”
Su trabajo busca conservar estos tesoros y asegurarse de que perduren para futuras generaciones.
El trabajo bien hecho es también su arte
Miguel Ángel se define por su exigencia y dedicación. Disfruta revisitando las obras que ha restaurado y sintiendo el orgullo de haber hecho un buen trabajo.
“Aquí me lo curré bien”, dice con satisfacción al recordar sus proyectos, siempre enfocado en la excelencia y el respeto por las piezas que trata.
Para él, cada obra es un fragmento sagrado de la historia y de las vidas de las personas y comunidades que la rodean.
Un educador en ciernes para inspirar el amor al arte
En su afán por transmitir su pasión, Miguel Ángel se está preparando para ser profesor en etapas superiores. Sueña con despertar en las nuevas generaciones el amor por el arte que él heredó de sus maestros.
Quiere ser ese mentor que inspire a futuros artistas, tal vez a niños que, como él, descubran su vocación esculpiendo figuras en plastilina.
"El arte es mi vida y mi legado"
En sus propias palabras, Miguel Ángel define su relación con el arte y el patrimonio:
- “Para mucha gente, la cultura está en sus iglesias y en su patrimonio cercano.”
- “Aquí me lo curré bien. Eso es lo que quiero sentir siempre al mirar mis obras.”
- “Quiero transmitir lo que heredé de mis maestros para que otros encuentren su camino en el arte.”
Miguel Ángel Borrego es más que un restaurador, es un guardián del patrimonio cultural de la Subbética.
Su amor por el arte y su dedicación a la preservación de la historia local lo convierten en un ejemplo de cómo el talento puede ponerse al servicio de la comunidad, creando un legado que trasciende generaciones.