El alcalde de Priego de Córdoba, Juan Ramón Valdivia, ha efectuado la firma del decreto municipal por el que se resuelve que Antonio Llamas y Juan Antonio Almendros quedan inhabilitados como alcaldes pedáneos de Lagunillas y Zamoranos, respectivamente.
En el decreto, al que ha tenido acceso este periódico, se justifica el inicio del procedimiento para la revocación de los respectivos nombramientos por "una actuación por iniciativa propia, pero actuando en su condición de alcaldes pedáneos, ante la Delegación de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía en Córdoba, así como una recogida de firmas, en la que se indicaba la existencia de graves deficiencias en la asistencia médica de esos vecinos sin que esta Alcaldía, ni su concejal delegado de aldeas, tuviesen conocimiento previo".
Debido a ello, se considera que "se habían incumplido obligaciones contenidas en al art. 3 del Reglamento de Alcaldes Pedáneos, así como que se habían atribuido la competencia de representación de vecinos y que se había producido una evidente actuación desleal con respecto a su representado".
"El Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de las Entidades Locales, que regula la figura de estos representantes de la alcaldía establece que el alcalde podrá removerlo cuando lo juzgue oportuno", según se detalla en el decreto.
INHABILITADOS PARA SU REELECIÓN
El escrito también refleja una serie de alegaciones por parte de ambos alcaldes pedáneos entre las que se incluyen que se trata de "una actuación absolutamente injusta hacia los vecinos", o que existe "una inexplicable indefensión y motivaciones espurias" además de la "imposibilidad de reunión con el alcalde para plantear las cuestiones que preocupan a los vecinos, así como falta de interés del alcalde", calificando la propuesta de “absoluta falta de rigor y fundamentación, injusta y antidemocrática”.
Esta situación coincide con la celebración del procedimiento de elección de alcaldes pedáneos que finalizará el día 18 de febrero con una consulta popular en el que los vecinos tendrán que elegir entre los candidatos que han conseguido los avales suficientes y entre los que se incluían tanto Antonio Llamas como Juan Antonio Almendros, quienes además de ser revocados de su nombramiento, también han sido apartados de este proceso al considerarse que "incurren en la causa de inelegibilidad contemplada en el art. 5 del Reglamento de Alcaldes Pedáneos".
Los motivos expuestos en el decreto se refieren a las "diferencias ideológicas reconocidas por los interesados así como haber sido los impulsores y por tanto participantes del movimiento ciudadano de recogida de firmas para demandas sanitarias en sus aldeas olvidando al resto del municipio", argumentando que estos actos son "incompatibles con la unidad de gobierno".
