A mediados de marzo, cuando el presupuesto municipal esté operativo, se convocarán tres plazas para cubrir las vacantes en la Policía Local de Iznájar.
Así lo ha anunciado esta mañana el alcalde del municipio, Lope Ruiz, ante la alarma social generada: "Asumo la responsabilidad como jefe de la Policía Local pero es imposible prever que en un año va a haber cinco plazas que no van a estar cubiertas el día 1 de enero por diferentes circunstancias".
En este sentido, Ruiz señaló que los puestos no se pueden cubrir hasta que no quedan vacantes, "como ha sido el caso de una plaza que ha estado de baja durante dos años y hasta que no ha tenido incapacidad permanente no la hemos podido sacar, así como dos de baja médica y otra que no ha pasado a la segunda actividad hasta el día 1 de enero".
A ello, el regidor iznajeño sumó la complejidad para cubrir estas vacantes con la actual Ley de Policía Local de Andalucía, cuyo proceso de selección es "largo y costoso" para que, posteriormente, "el ayuntamiento se haga cargo del sueldo de los elegidos durante los seis meses que pasan en la academia y, tras un año en el municipio, se trasladan a otro que no paga la formación".
Por ello, Ruiz reclama que se modifique esta ley para que "se forme un cuerpo de policía local que sea similar al resto de funcionarios de Andalucía" así como para "facilitar la cobertura de las plazas vacantes en un momento determinado".
En todo caso, el alcalde iznajeño niega que el término municipal sea inseguro gracias, entre otras cosas, a los cinco guardias civiles en el cuartel y a los seis guardias rurales, "que cumplen el rol de la policía local en el campo al ser un término municipal amplio compuesto por 20 pueblos pequeños" y que han permitido que "las últimas incidencias se hayan resuelto sin ningún tipo de problema".
Así, Ruiz pidió tranquilidad e instó a que "no se traslade fuera el mensaje de que somos un municipio sin seguridad ya que puede afectar a la misma". En todo caso, recordó que existen convenios con la Mancomunidad de la Subbética a la hora de que los policías puedan prestar servicios en otras localidades si fuera necesario.