En torno a un centenar de componentes de la comunidad de regantes Paño Cabezas, de Jauja y la localidad vecina de Badolatosa, acompañados por varias decenas de vehículos agrícolas han tomado parte esta mañana en una manifestación celebrada en la pedanía lucentina para reivindicar de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir el permiso para proceder al almacenamiento y uso de un hectómetro cúbico de las aguas no reguladas que durante la época invernal circulan por el Río Genil para perderse sin aprovechamiento alguno.
Los agricultores se han concentrado en el puente sobre el Genil, que une las provincias de Córdoba y Sevilla para discurrir posteriormente por varias calles hasta concluir en el edificio de alcaldía de Jauja.
Según el presidente de la comunidad de regantes Paño Cabezas, Eduardo Gómez, en la opción demandada –sin respuesta por parte de la administración desde hace más de dos años– reside buena parte del futuro de sus plantaciones de olivar en régimen de secano “ubicadas en una zona de mínima pluviometría está haciendo morir la economía de todo un pueblo” y mantienen el carácter social de su reivindicación, apuntando que “vendría a aliviar la economía de más de 200 familias, propietarias de las 843 hectáreas que componen la superficie objeto de transformación.
Los agricultores han proyectado una balsa de gran capacidad que permita almacenar la gran mayoría del agua necesaria para el riego de sus olivares y aseguran que la medida no tendría repercusión alguna sobre los regadíos programados por la CHG en la cuenca del Genil, dado que la captación se realizaría aguas abajo de los distintos embalses existentes y en época invernal, no afectando tampoco al caudal habitualmente circulante por el Rio Genil.
Junto a los miembros de la comunidad de regantes han tomado parte en la concentración el alcalde de Lucena, Juan Pérez y miembros de distintas formaciones políticas y centrales sindicales agrarias, que han mostrado su apoyo a los agricultores.
