El secretario general de UGT-Córdoba, Vicente Palomares, ha afirmado este miércoles que la empresa aceitera lucentina Aceites y Energía Santamaría, denunciada por CCOO por supuestamente no pagar atrasos a sus empleadas, en realidad habría estado incumpliendo el convenio del sector a este respecto con sus trabajadoras, pero también con sus trabajadores, al no haber actualizado aún los salarios de acuerdo al convenio colectivo..
Según señala la agencia de noticias EuropaPress, Palomares, en declaraciones a los periodistas poco antes de participar en una jornada sobre 'Discapacidad sobrevenida. Retos laborales y personales', Palomares ha señalado que "lo que ha pasado en esa supuesta discriminación a mujeres con el pago de unos atrasos" está siendo estudiado por su sindicato y "parece, según los primeros indicios, que no es todo como se cuenta".
En este sentido, Palomares ha dicho que en UGT les gusta "ser rigurosos" y por eso es ahora, tras hacer averiguaciones, cuando pueden decir que "no solo son mujeres las que no han cobrado atrasos, sino también hombres, es decir, no parece que haya habido una discriminación flagrante".
El secretario general de UGT-Córdoba ha avisado que "estas cuestiones hay que tomarlas con cierta seriedad porque podemos hacer mucho daño, no solo a la empresa, sino a los trabajadores que están dentro de esa empresa", de modo que "hay que ser cuidadosos y delicados con estas cuestiones y eso es lo que estamos haciendo desde UGT", en cuyo seno van a "analizar todos los datos" e informarán "de lo que realmente ha ocurrido" en la empresa.
Con posterioridad a estas declaraciones, la Unión General de Trabajadores de Córdoba (UGT) ha emitido una nota de prensa en la que niega la discriminación por razón de sexo argumentada por CCOO. Según UGT "esta información ha sido confirmada por el representante sindical de UGT y por la propia empresa implicada y constatada por el sindicato", para el que "simplemente se trata de realizar una actualización de la subida del convenio a peones, oficiales y transportistas, en cuyas categorías laborales existen en la empresa más de una veintena de trabajadores y trabajadoras afectadas".
Del mismo modo se manifiesta que "UGT se encuentra sentada desde un primer momento con los representantes de la empresa lucentina y el representante legal de sus trabajadores, recopilando la información pertinente para tratar este tema con la obligada responsabilidad y credibilidad contrastada, en aras de evitar lo sucedido con declaraciones alarmistas y condenatorias de todo tipo en los medios de comunicación" y añade que "esta situación para nada debe ser catalogada como discriminatoria"
Según UGT " la disponibilidad por parte de la empresa para la actualización de la subida del convenio está siendo total con vistas a solucionar el problema".