INFRAESTRUCTURAS

La Diputación de Córdoba invierte 600.000 euros en el arreglo de la CO-6203 entre Luque y Zuheros

La institución provincial acomete la mejora del alumbrado público y las instalaciones deportivas de Fuente-Tójar

ZUHEROS CARRETERA

La Diputación de Córdoba destinará un total de 597.583 euros al arreglo de los cinco kilómetros más deteriorados de la carretera provincial CO-6203, que une la N-432 y la A-318 entre Luque y Zuheros, a través de una intervención que ejecuta la UTE Mebisa-Geotécnica del Sur.

El delegado de Cooperación con los Municipios y Carreteras de la institución provincial, Maximiano Izquierdo, ha visitado las obras, que cuentan con un plazo de ejecución de cuatro meses.

El proyecto permitirá ejecutar dos pantallas de micropilotes en distintos tramos amenazados de cortarse al tráfico por hundimiento de calzada entre Zuheros y la Estación de Doña Mencía, así como reparar el acceso a Luque desde la N-432, que también presenta tramos deteriorados, y renovar la señalización de la vía.

Izquierdo ha destacado la importancia de la medida, que afecta a tres municipios, y “constituye la vía de acceso principal a los municipios turísticos de Luque y Zuheros”.

El responsable de Cooperación con los Municipios de la Diputación también ha visitado recientemente Fuente-Tójar, donde firmó el acto de entrega de la obra correspondiente a la segunda fase de sustitución del alumbrado público del municipio a tecnología led, que ha afectado a 46 puntos de luz en el casco urbano, 20 proyectores en el polideportivo y otro ocho en la pista de pádel.

La intervención, que ha sido acometida a través del Plan Provincial Extraordinario de Inversiones Municipales Financieramente Sostenible de 2016, ha supuesto una inversión cercana a los 37.000 euros.

Izquierdo ha señalado que “la medida ha permitido la sustitución de 46 puntos de luz, lo que supone el 20% del alumbrado exterior de la zona del casco urbano de la localidad, después de que ya en la primera fase se acometiera el 80% restante, lo que permite una reducción de la potencia instalada de en torno al 50 por ciento”.