La poeta ruteña Ángeles Mora ha obtenido el máximo galardón que un pueblo puede otorgar a un paisano suyo. En enero el Ayuntamiento en pleno la nombró Hija Predilecta de la Villa. Ahora ha disfrutado del cariño y los aplausos de sus paisanos. Así, el primer sábado de junio, la homenajeada fue conducida por la Banda Municipal, desde las puertas del Consistorio y hasta el salón de actos del Edificio Alcalde Leoncio Rodríguez para recibir esos honores. Ángeles Mora Fragoso nació en Rute en 1952, vive en Granada desde los años 80. En la ciudad nazarí publicó sus primeros libros. Sin embargo, ya había empezado a escribir en Rute sus poemas iniciales. De hecho, aquellos primeros poemas, reunidos bajo el título de “Caligrafías del ayer”, vieron la luz en el año 2000, gracias a la editorial Ánfora Nova. No obstante, fue en Granada, tras licenciarse en Filología Hispánica, donde comenzó su caminar poético.
La galardonada cuenta con motivos “más que sobrados e imposibles de enumerar” para este otorgamiento. Así lo manifestó Ana Lazo, concejala de Cultura del Ayuntamiento de Rute, durante el acto. Sin embargo, Lazo espera que la poeta ruteña guarde este día en su corazón, como muestra del afecto y el reconocimiento del pueblo que la vio nacer. En cuanto a sus méritos, lo más reciente le ha llegado por su obra “Ficciones de una autobiografía”, por la que ha recibido el Premio Nacional de Poesía. Poco antes, por esa misma obra, también había sido reconocida con el Premio Nacional de la Crítica. Además, Ángeles Mora ha sido profesora en Granada, es miembro de la Academia de las Buenas Letras de Granada, ciudad donde ahora reside, y ha desarrollado su vida junto al también profesor y escritor Juan Carlos Rodríguez, recientemente fallecido.
Su trayectoria poética y sus vínculos con Rute fueron repasados a través de un vídeo coordinado por el profesor y también poeta ruteño, Francisco David Ruiz, y la documentalista Antonia Ortega. Fue un acto emotivo y marcado por la poesía, en el que varios alumnos y alumnas del Colegio Público 'Los Pinos' recitaron algunos de sus poemas. Al alcalde Antonio Ruiz le correspondió hacerle entrega de una insignia y de su reconocimiento como Hija Predilecta.
Durante su intervención, Ángeles Mora, conmovida, recordó su infancia y juventud en Rute. Según dijo, fue una infancia marcada “por la nostalgia”, y la definió como “un territorio inabarcable”. Según ella misma reconoció, tuvo una infancia feliz y una adolescencia melancólica. Con sus palabras tuvo presentes a sus padres y hermanos, a sus amigas, con las que jugó y creció, a sus profesores, a sus sobrinos y a su hija Cristina, presentes en el acto. Y también a su difunto marido, Juan Carlos Rodríguez, y a sus hijos Marian y Curro, que no pudieron asistir.
Hace muchos años que la galardonada se fue de Rute. Sin embargo, siente que fue ayer cuando en su casa de la calle Priego se sentaba a escribir. Por eso, terminó su alocución evocando una imagen que siempre la acompaña, una que tiene grabada “en la retina del corazón”, nítida: la de las aceras cubiertas de matalahúva secándose al sol. De ahí que la poeta comparase el proceso de producción poética con el de destilación del anís. Mora considera que la poesía es el producto que queda destilado tras un lento período de trabajo, en el que los elementos ideológicos y materiales se someten a la intensidad del fuego y del pensamiento.
Finalmente, Antonio Ruiz habló de la importancia de la raíces, asegurando que el mayor patrimonio de un pueblo son sus gentes, y elogiando el legado de Ángeles Mora y otros poetas ruteños. Además, según Ruiz, con este tipo de reconocimientos el pueblo muestra su generosidad y la homenajeada se convierte en un ejemplo a seguir. El acalde también se refirió a lo mucho que le debemos a los poetas, a su modo de ver y vivir la vida, concluyendo con un poema de la propia Ángeles Mora. Asimismo, para la ocasión se ha reeditado Juego de cartas, una colección de poemas de la propia autora. Se trata de una publicación de lujo que ha corrido a cargo de la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Rute y cuya venta se ha canalizado en beneficio de la Junta Local de la Asociación Española Contra el Cáncer.